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La suplementación mineral puede ser de gran ayuda para complementar la dieta y cubrir carencias nutricionales, pero para aprovechar realmente sus beneficios, es fundamental saber leer e interpretar correctamente las etiquetas. Entender qué estás tomando, en qué cantidad y cómo debe tomarse es clave para garantizar eficacia y seguridad.
A continuación, te explicamos los elementos más importantes que debes revisar en el etiquetado de estos productos. Además puedes consultar un especialista.
No basta con ver que un suplemento contiene, por ejemplo, magnesio o zinc. Es importante fijarse en la forma química en la que se presenta ese mineral, ya que eso influye directamente en su absorción y eficacia. Algunas formas comunes:
Cuanto más biodisponible sea la forma del mineral, más fácilmente lo podrá aprovechar tu organismo.
En la etiqueta encontrarás la cantidad de mineral que aporta cada dosis (por cápsula, comprimido, sobre, etc.), expresada en miligramos (mg) o microgramos (µg). Esta cantidad debe compararse con los valores recomendados diarios para saber si el suplemento es adecuado para ti.
Junto a la cantidad del mineral, muchas etiquetas indican el porcentaje de la CDR o VRN (Valor de Referencia de Nutrientes). Este dato te permite saber qué parte del requerimiento diario cubre ese suplemento.
Por ejemplo, si un producto indica que aporta un 80% del VRN de zinc, significa que con una sola toma estás cubriendo la mayor parte de tus necesidades diarias.
Revisa si el suplemento incluye otros ingredientes activos, como vitaminas que potencian la absorción (por ejemplo, la vitamina C junto al hierro), o si contiene excipientes, alérgenos o azúcares añadidos. Esto es especialmente importante para personas con intolerancias o necesidades dietéticas específicas.
Lee con atención la posología recomendada (cuántas unidades tomar al día y en qué momento) y las advertencias del fabricante. Algunos minerales pueden interactuar con medicamentos o no ser recomendables en determinadas condiciones (como el hierro en exceso o el yodo en personas con trastornos tiroideos).
Si tienes dudas al elegir un suplemento mineral, tu farmacia es el mejor lugar para recibir asesoramiento experto. El equipo farmacéutico puede ayudarte a interpretar el etiquetado, valorar tus necesidades nutricionales y recomendarte el producto más adecuado en función de tu edad, dieta, estilo de vida o condiciones de salud.